CRISTIANISMO SECULAR
A veces me
llegan a mis redes noticias de conciertos o eventos culturales en lugares que
antes eran Iglesias. Quienes me lo envían aplauden que las religiones, en
particular el cristianismo esta en retroceso y las antiguas Iglesias son des
consagradas y convertidas en otra cosa, que permite conservar la bella
arquitectura existente. La religión organizada, sea cual fuere, está retrocediendo.
No sé si sea bueno. Hace poco, leyendo un texto en la revista virtual frontera d sobre la situación de los parsis
(seguidores del culto persa a Zoroastro en la India), y pensaba que así como
lamentamos la desaparición de un idioma, no lo hacíamos igual cuando desaparece
una religión. En uno lo lamentamos, en el otro, la respuesta mayoritaria -creo-
seria “depende”.
Quizá el
cristianismo puede estar muriendo en el sentido que las personas educadas, van
cada vez menos a misa, ya no creen la verdad literal de los evangelios, o que
los malvados pasaran la eternidad en el Infierno. De hecho, creo que ni un
sacerdote tiene claro lo que cree, mas aun desde la llegada del Papa Francisco
a Roma, con sus discursos cada vez más sibilinos.
Eso no
quiere decir que el conjunto de creencias que dio forma a una civilización y
mantenido por dos milenios pueda ser cambiado, como una serpiente cambia de
piel. Pero la serpiente, aunque cambie de piel, sigue siendo una serpiente.
A primera
vista, en mi visión, la comprensión secular del mundo y la existencia que las
personas educadas comparten tiene poco en común, y en realidad, se opone a la
comprensión religiosa del mundo y la existencia (en este caso, humana) que
alguna vez compartieron. No tengo razones para creer, por ejemplo, en la
salvación o la condena por mis acciones en esta tierra. De hecho, creo
simplemente que mi destino es la extinción. Si hay una vida después, si es otra
manera, pues ojalá, pero pensar con el deseo no es una buena guía en este
mundo.
Pero no es
posible negar que la ética laica, al menos en occidente sigue estando
profundamente imbuida por principios cristianos, incluso si están mal
aplicados. El perdón de los pecados, amar al prójimo, la superioridad moral de
los pobres sobre los ricos, poner la otra mejilla si se te golpea (pese a un
demoledor ataque que hizo el Papa Francisco en este aspecto hace algunos años)
están muy presentes en la psicología de occidente, incluso entre los ateos. Al
final, derivan del cristianismo.
Lo sagrado
y lo secular se han acercado durante mucho tiempo. Al final, la teología de la liberación
fue un ejemplo de ello: se nutre del marxismo en su análisis, y buscaba armonizar las virtudes cristianas
con la vida diaria; oír hablar al Papa Francisco es escuchar a un político en
busca del aplauso, buscando en los aspectos de la vida diaria armonizar algunas
de las enseñanzas cristianas. En el camino, han tomado significados muy
diferentes a los señalados en la doctrina cristiana.
Tomemos primero,
el remordimiento, el arrepentimiento y la expiación. En términos religiosos, son
estados internos y personales que nos enseñan y nos llevan a la penitencia; son
un acto privado que nos permite purificar lo negativo y re encausar la senda.
Pero como lo vemos en las sociedades de hoy, cuando se hace público, tiene mas
de confesiones y autocríticas marxistas, en busca de un beneficio o recompensa.
Es decir, mientras que, si somos cristianos, el arrepentimiento y el perdón nos
acerca a Dios, en estos tiempos, nos acerca a la sociedad.
Si bien
las sociedades de hoy ve en términos negativos, la religión en el sentido que las personas
educadas rechazarían cualquier enseñanza religiosa (y quienes las aceptan son
acusados de ignorantes, retrógrados y retardatarios) en el caso que mas
conozco, la mayoría de las personas se declaran seguidores de Cristo. Una amiga
lo expreso de forma magnifica “Perdí mi fe. Solo creo en Jesús”. Las
enseñanzas del maestro aun resuenan en nuestra sociedad. Vagan por el mundo
como ovejas perdidas. Y a veces las confunden con chivos y llamas. No se si eso, al final, sea bueno. Diferente, sí.
Imagen tomada de internet
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