UN OSCURO RETRATO DE MÉXICO: UNA NOVELA CRIMINAL DE JORGE VOLPI
El periodismo, en general, tiene buena prensa: "el mejor oficio del mundo". A mí sin embargo, que conozco periodistas, lo considero un trabajo ingrato: muy mal pagado, absorbente, de práctica infeliz, y a ratos peligroso. Una lectura que hice, señala que muchos periodistas, ante la realidad cruda, desean en el fondo, ser otra cosa: escritores, comunicadores institucionales, traductores, editores, profesores. Como escritores, no lo hacen tan mal; al fin y al cabo, manejar la información, las limitaciones de tiempo y espacio, que trae su trabajo diario, pueden ser un taller de escritura en toda regla. En cambio, para un escritor hacer de periodista suena algo impostado por mucho que se esfuerce. Es un juicio que me parece valido: escribir implica reflexionar, releer, corregir, y los límites de tiempo son establecidos por el escritor. Si toma un hecho real, siempre sera acusado de hacer una ficción con apariencia de realidad. Quizá por eso, Jorge Volpi titulo de manera modesta su libro Una novela criminal: sabía que por mucho que se esforzara no podría escapar de la acusación de haber escrito una ficción que parece periodismo de investigación. Investigo y obtuvo 800 paginas; reescribió y quedaron 500. Ahora, ¿es Una novela criminal una ficción? Dar respuesta a esa pregunta se busca en estas líneas.
Es inevitable al comenzar a leer, buscar datos sobre el caso del cual se basa el libro: El enrevesado caso de Florence Cassez, ciudadana francesa y su expareja, el mexicano Israel Vallarta, quienes fueron acusados de pertenecer a una banda de secuestradores, en el 2005, cuyo "arresto" fue transmitido en horario Prime time en los noticiarios de televisión. Arresto que se comprobó había ocurrido el día anterior, y que lo mostrado había sido una puesta en escena. El caso Cassez enveneno las relaciones franco-mexicanas, al tomar cada presidente del momento (Sarkozy y Calderón, respectivamente) el tema como un asunto personal. Un caso, que a la fecha, no ha sido resuelto. Si bien Cassez fue liberada, y viajo a Francia, Vallarta lleva detenido 13 años sin ser sometido a juicio, a la espera de justicia. Quizás por eso, Volpi mira con simpatía discreta (pese a su objetividad) a Vallarta: Al fin y al cabo el es el personaje trágico de esa historia.
Pensar que la obra debe a trabajos anteriores como A Sangre Fría de Truman Capote, (el autor reconoce la deuda con Capote (1)) o La canción del verdugo de Norman Mailer es una obviedad monumental. Las obras parten de un hecho policíaco, y siguen la investigación en curso, a través de entrevistas, lectura de expedientes, transcripciones de amparos, audiencias y juicios; un trabajo arduo y de años, que produce los resultados que conocemos. Sin embargo, ahí acaban las similitudes. Las diferencias de Una novela.... con sus predecesoras son notorias: para empezar el hecho que en ultimas, el caso Cassez-Vallarta no ha concluido, ni se ha cerrado, como el hecho que Una novela criminal deviene en una cuidada descripción y denuncia de los peores aspectos de la justicia mexicana: su corrupción, los favoritismos, la demora en ser impartida, que al final, te das cuenta que el autor, no solo nos describe en las graves fallas de la justicia, sino algunos de los peores aspectos de México: la corrupción, el favoritismo, el clasismo, el deseo de venganza, la violencia como forma de solución de controversias. No es pues una crónica escueta de unos hechos, ni una ficción basada en hechos reales. En algún lugar entre estas dos partes esta Una novela criminal. Si quisiera buscar antecedentes, pensaría en esas novelas morales del siglo XIX, que describen los hechos (reales o no) mientras que el autor nos llena de admoniciones contra los actos descritos. Pero tampoco sería una equivalencia exacta: Volpi describe los hechos, se extraña por las irregularidades de la investigación, se indigna, no traga entero y al final emite una opinión de forma mas o menos discreta. Al final, mas una novela de ficción en toda regla, en mi opinión
No es una novela fácil de leer, y si se comete un descuido, es fácil perderse en el laberinto de información que se maneja. El autor observa con atencion, nos cuenta lo que leyó, por momentos se permite divagar, juzgar y tomar partido: Ya dijimos que Volpi mira con simpatía a Vallarta; también a Cassez, e igual se indigna con las autoridades, los secuestrados y con la "lucha de egos" desatada entre Calderón y Sarkozy por el caso Cassez, lucha que en el fondo ve como inútil y que retrasa el ejercicio de la justicia.
He leído en algunas reseñas (2) que es un libro "por momentos demasiado prolijo y que el contenido sea reiterativo". Eso es innegable, y atenta contra la fluidez del relato; sin embargo estos capítulos son necesarios para captar un hecho del cual el autor parece darse cuenta en el camino: Que el relato que esta haciendo, trasciende sus intenciones originales: Si Volpi en algún momento quedo fascinado con la idea de escribir una novela de no ficción pronto esa idea fue desbordada por una mayor: describir, y denunciar los peores aspectos de la justicia mexicana, que hacen en, palabras del propio autor, "que esto era una clara prueba de que México es un Estado fallido. Entonces a mí me entraba como una vena patriótica: “bueno, fallido en unas cosas, en otras no”, hasta que reparé que por supuesto es fallido un sistema que no garantiza una justicia confiable. Lo que el caso demuestra es que somos una especie de ciudadanos a medias" (1)
IMAGEN TOMADA DE:
https://entreabogadosteveas.wordpress.com
Es inevitable al comenzar a leer, buscar datos sobre el caso del cual se basa el libro: El enrevesado caso de Florence Cassez, ciudadana francesa y su expareja, el mexicano Israel Vallarta, quienes fueron acusados de pertenecer a una banda de secuestradores, en el 2005, cuyo "arresto" fue transmitido en horario Prime time en los noticiarios de televisión. Arresto que se comprobó había ocurrido el día anterior, y que lo mostrado había sido una puesta en escena. El caso Cassez enveneno las relaciones franco-mexicanas, al tomar cada presidente del momento (Sarkozy y Calderón, respectivamente) el tema como un asunto personal. Un caso, que a la fecha, no ha sido resuelto. Si bien Cassez fue liberada, y viajo a Francia, Vallarta lleva detenido 13 años sin ser sometido a juicio, a la espera de justicia. Quizás por eso, Volpi mira con simpatía discreta (pese a su objetividad) a Vallarta: Al fin y al cabo el es el personaje trágico de esa historia.
Pensar que la obra debe a trabajos anteriores como A Sangre Fría de Truman Capote, (el autor reconoce la deuda con Capote (1)) o La canción del verdugo de Norman Mailer es una obviedad monumental. Las obras parten de un hecho policíaco, y siguen la investigación en curso, a través de entrevistas, lectura de expedientes, transcripciones de amparos, audiencias y juicios; un trabajo arduo y de años, que produce los resultados que conocemos. Sin embargo, ahí acaban las similitudes. Las diferencias de Una novela.... con sus predecesoras son notorias: para empezar el hecho que en ultimas, el caso Cassez-Vallarta no ha concluido, ni se ha cerrado, como el hecho que Una novela criminal deviene en una cuidada descripción y denuncia de los peores aspectos de la justicia mexicana: su corrupción, los favoritismos, la demora en ser impartida, que al final, te das cuenta que el autor, no solo nos describe en las graves fallas de la justicia, sino algunos de los peores aspectos de México: la corrupción, el favoritismo, el clasismo, el deseo de venganza, la violencia como forma de solución de controversias. No es pues una crónica escueta de unos hechos, ni una ficción basada en hechos reales. En algún lugar entre estas dos partes esta Una novela criminal. Si quisiera buscar antecedentes, pensaría en esas novelas morales del siglo XIX, que describen los hechos (reales o no) mientras que el autor nos llena de admoniciones contra los actos descritos. Pero tampoco sería una equivalencia exacta: Volpi describe los hechos, se extraña por las irregularidades de la investigación, se indigna, no traga entero y al final emite una opinión de forma mas o menos discreta. Al final, mas una novela de ficción en toda regla, en mi opinión
No es una novela fácil de leer, y si se comete un descuido, es fácil perderse en el laberinto de información que se maneja. El autor observa con atencion, nos cuenta lo que leyó, por momentos se permite divagar, juzgar y tomar partido: Ya dijimos que Volpi mira con simpatía a Vallarta; también a Cassez, e igual se indigna con las autoridades, los secuestrados y con la "lucha de egos" desatada entre Calderón y Sarkozy por el caso Cassez, lucha que en el fondo ve como inútil y que retrasa el ejercicio de la justicia.
He leído en algunas reseñas (2) que es un libro "por momentos demasiado prolijo y que el contenido sea reiterativo". Eso es innegable, y atenta contra la fluidez del relato; sin embargo estos capítulos son necesarios para captar un hecho del cual el autor parece darse cuenta en el camino: Que el relato que esta haciendo, trasciende sus intenciones originales: Si Volpi en algún momento quedo fascinado con la idea de escribir una novela de no ficción pronto esa idea fue desbordada por una mayor: describir, y denunciar los peores aspectos de la justicia mexicana, que hacen en, palabras del propio autor, "que esto era una clara prueba de que México es un Estado fallido. Entonces a mí me entraba como una vena patriótica: “bueno, fallido en unas cosas, en otras no”, hasta que reparé que por supuesto es fallido un sistema que no garantiza una justicia confiable. Lo que el caso demuestra es que somos una especie de ciudadanos a medias" (1)
Estamos pues, ante una novela que trasciende los hechos que cuenta, para construir un retrato nada amable del México de hoy y su justicia. ¿Agradable de leer? En general si, aunque debe leerse con mucha atencion. Lo que es innegable es que es una novela excepcional, de los mejores trabajos que he leído.
NOTA:
El titulo proviene de la amable dedicatoria que el autor tuvo a bien hacerme; por tanto, la expresión "Un oscuro retrato de México", le pertenece.
NOTA:
El titulo proviene de la amable dedicatoria que el autor tuvo a bien hacerme; por tanto, la expresión "Un oscuro retrato de México", le pertenece.
FUENTES:
(1)https://elpais.com/cultura/2018/04/18/actualidad/1524073885_797895.html
(2) https://elcultural.com/revista/letras/Una-novela-criminal/40870
(2) https://elcultural.com/revista/letras/Una-novela-criminal/40870
IMAGEN TOMADA DE:
https://entreabogadosteveas.wordpress.com
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